Mientras siguen las negociaciones con Washington DC, el Gobierno postergó los vencimientos con el FMI de esta semana y el resto del mes al 31 de julio, como había hecho el mes pasado
Mientras mantiene las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la quinta revisión y los cambios de metas, el Gobierno postergó los vencimientos con el organismo de esta semana y el resto del mes al 31 de julio, como había hecho el mes pasado.
Así lo confirmaron fuentes oficiales a El Cronista. La medida fue coordinada con el organismo, que el mes pasado detalló que el país tiene la potestad de tomar esa decisión.
En Economía esperan que se produzcan los desembolsos pendientes de la quinta revisión para poder cancelar los vencimientos. Se trata de u$s 4000 millones, aunque la negociación aspira además a que se adelanten los flujos que restan hasta fin de año o -al menos- hasta septiembre, lo que representaría cerca de unos u$s 3000 millones más.
Para esto, se esperaba una visita a Washington DC del jefe de asesores de Economía, Leonardo Madcur y el viceministro Gabriel Rubinstein aunque no se confirmó oficialmente el viaje. Las negociaciones se llevan adelante de forma virtual. La semana pasada, hubo una reunión informal del directorio del Fondo Monetario donde el staff técnico dio a conocer el estado de la negociación con la Argentina.
Este mes hay que cubrir vencimientos por u$s 2660 millones con el Fondo Monetario. De ese total, unos u$s 1300 millones debían abonarse este viernes. Restan después dos pagos más, por u$s 650 y 690 millones.
El viernes pasado, en tanto, el Gobierno canceló los u$s 2700 millones que vencían a partir del 20 de junio. Se había planteado la posibilidad de hacer un pago parcial en fecha pero Economía resolvió postergar todos los pagos hasta fin de mes. Y volverá a hacerlo en julio.
En el caso del pago del mes pasado, se utilizó un remanente de derechos especiales de giro (DEG) y se completó el pago con u$s 1100 millones en yuanes de la línea de libre disponibilidad del swap, que el Fondo debe después ‘vender’ a algún país que los quiera, lo que probablemente lo lleve a recurrir a China.
Este martes, por otra parte, el secretario de Finanzas, Eduardo Setti, confirmó que se cancelarán los u$s 1000 millones que vencen con los tenedores de bonos globales del canje de 2020. En ese caso, los pagos se realizan en distintas jurisdicciones -emitidos bajo ley de Nueva York, en Europa y bajo ley local- y el impacto en las reservas se irán viendo en la semana.
El equipo económico busca dar una señal de “certidumbre y tranquilidad al mercado” con el cumplimiento de los pagos con los acreedores, según detalló Setti en Twitter al dar a conocer la confirmación para los bonistas.
En medio de la escasez de divisas, el Gobierno busca sostener el pago de importaciones para no perjudicar la actividad económica y apuesta al uso del swap con China, del que, según detalló El Cronista, ya se consumió la mitad del primer tramo de u$s 5000 millones renovado en Beijing el mes pasado. Una vez que se cubra ese monto, se puede recurrir a una segunda parte de u$s 5000 millones de libre disponibilidad.
