Carla Vizzotti y Santiago Cafiero explicarán esta tarde cómo funcionará la comisión que formarán para despejar las dudas, luego del escándalo a raíz de las vacunaciones irregulares.
Mientras que desde México Alberto Fernández calificó de “payasada” las críticas por el vacunatorio VIP, funcionarios de primera línea del gobierno nacional toman decisiones con el fin de esclarecer la situación.
La ministra de Salud Carla Vizzotti participó esta mañana de una reunión virtual con los integrantes de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn), luego del escándalo que derivó en la renuncia de Ginés González García como ministro.
Durante esa reunión, según explicaron desde el Gobierno, se trabajó en “la implementación de un nuevo sistema de monitoreo y trazabilidad para fortalecer la transparencia“. En esa línea, buscan establecer los criterios para definir cuál es el “personal estratégico” del gobierno que estará habilitado a acceder a la vacunación.
Es decir, se especificará quiénes estarán habilitados a ser inmunizados en función al riesgo y a los alcances de sus tareas por el cargo que ocupan. También deberán pedir autorización previa al ministerio de Salud. También será necesario firmar un formulario de acceso a la información para que exista un registro público sobre todos los que fueron vacunados.
De esta forma, se creará una comisión, que tendrá como objetivo “monitorear la trazabilidad de la vacunación del personal estratégico“. Estará integrada, según sostienen desde el Gobierno, por “reconocidos expertos en inmunización, bioética, salud y derechos”.
Esta tarde, a las 15 horas, Carla Vizzotti y Santiago Cafiero explicarán los detalles de la comisión y de los nuevos criterios para acceder a la inmunización.
El plan de vacunación original del gobierno nacional, comunicado en diciembre pasado cuando estaban por llegar las primeras dosis, no especificaba esta cuestión. En ese momento se estableció un sistema escalonado con siete etapas.
El primer grupo estaba compuesto por el personal de salud. El segundo por adultos de más de 70 años y residentes en geriátricos. La tercera etapa estaba compuesta por adultos de entre 60 y 69 años. El siguiente, el personal de fuerzas armadas, de seguridad y de servicios penitenciarios. Luego los adultos de 18 a 59 años con factores de riesgo. En la sexta etapa llegarían los trabajadores de la educación, docentes y no docentes. Y recién el séptimo grupo contemplaba “otras poblaciones estratégicas definidas por las jurisdicciones y la disponibilidad de dosis”.
El Cronista
