Por ahora, el presidente marca el ritmo de la política. Pero esta semana vuelven a protagonizar sendas actividades públicas dos líderes que podrían disputarle la escena. Territorio, Venezuela y 2025 en el horizonte.
Esta será una semana atípica para Javier Milei. Por primera vez desde que llegó a la presidencia, deberá convivir con la intervención en la discusión política de los dos expresidentes y líderes políticos que buscan, con distintas estrategias, socavarlo: Mauricio Macri, que hablará este jueves para ordenar al PRO frente al Gobierno libertario, y Cristina Fernández de Kirchner, que el sábado reaparecerá públicamente desde México para fijar posición respecto de la situación en Venezuela.
Envalentonado por el protagonismo internacional que le valió el enfrentamiento con Nicolás Maduro, Milei surfea en la política doméstica las luchas intestinas que cruzan a su gabinete y la inestabilidad financiera sin haber encontrado, hasta ahora, voces que lo contrapesen en un debate público en el que él marca el ritmo. Entrado el segundo semestre de su administración, y mientras en el Congreso se acumulan proyectos para rechazar decisiones del Poder Ejecutivo, ese escenario empieza a cambiar.
El primero en reaparecer, después de un largo autoimpuesto silencio que solo interrumpió para expresar vía Twitter apoyos o reclamos al Gobierno, será Mauricio Macri este jueves con un gran acto en La Boca. Convocó a mil invitados, entre los que se destacarán los intendentes y gobernadores del PRO, que con su sola presencia estarán enviando un mensaje claro a La Libertad Avanza (LLA): el partido que fundó Macri hace 20 años hoy tiene una territorialidad y una presencia y construcción política en los distritos que debería ser respetada.
Tendrán un lugar destacado en la programación algunos liderazgos nuevos que PRO busca instalar de cara a los próximos turnos electorales. Se cuentan, entre ellos, el flamante presidente de la asamblea partidaria y ex intendente de Pinamar, Martín Yeza; la intendenta de Vicente López, Soledad Martínez; el jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri; y los gobernadores Ignacio Torres (Chubut) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos). En la antesala del acto, en el macrismo insisten: “La elección del 25 es territorial”.
Macri abrirá con su discurso una nueva etapa en la relación política de PRO con Milei y con LLA. En ese vínculo ya no talla la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que a los efectos del ordenamiento partidario quedó del lado libertario. Tampoco existe, para Macri, la posibilidad de fusión con los libertarios, por lo que el acto del jueves sentará las bases de una convivencia que promete ser incómoda, puesto que ambos espacios comparten votantes. La intensidad de esa incomodidad será determinada por las palabras que elija el ex presidente.
En las últimas horas, Milei y Macri se mostraron alineados frente a la situación en Venezuela. El presidente eligió emparejarse con Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay para desconocer el cuestionado resultado que informó el Consejo Nacional Electoral (CNE) local. Macri, por su parte, adoptó una estrategia llamativa: exhortó desde su cuenta de Twitter al presidente de Brasil, Lula Da Silva, a que tome posición. En las últimas horas, ambos quedaron desdibujados en el tablero de la geopolítica global: el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, conversó con Lula durante media hora y anunció que está coordinando con Brasil la postura y acciones en el tema.
Biden y Lula no hablaron, como Milei y Macri, de fraude consumado. Haciendo gala de la mesura y la prudencia que exige una situación sumamente delicada, en su primer pronunciamiento pidieron que sean publicados de manera inmediata, completa y transparente los resultados detallados de la elección. Una postura similar tuvo el mexicano Andrés Manuel López Obrador: “No olvidemos que hubo elecciones. Cuando son acciones violentas, cuando son golpes de Estado, eso se condena, no se puede permitir. Cuando hay elecciones es otra cosa. Es pedir, si existen dudas, que se den a conocer los resultados, que se limpie la elección si es que hace falta, que se cuenten votos”, exhortó.
López Obrador será anfitrión el sábado en el Instituto Nacional de Formación Política de su partido político, Morena, de la reaparición de Cristina Fernández de Kirchner, que no se refirió aún a la elección venezolana. La expresidenta viajará a México para darle cierre al Curso Internacional Realidad político y electoral de América Latina. La oportunidad ideal para volver a marcar la cancha ante Milei.
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