Argentina pidió una reunión bilateral.Brasil todavía no confirmó si recibirá a la comitiva oficial.EE.UU envió a su secretario de Estado y Francia a su canciller.
El gobierno enviará entre hoy y mañana una delegación a Brasil para participar de la cumbre del G20 y aflojar las tensiones con el presidente Lula. La comitiva oficial estará integrada por la canciller Diana Mondino, donde hay expectativa de una reunión bilateral, y la semana próxima se sumará el ministro de Economía, Luis Caputo, y el titular del Banco Central, Santiago Bausili.
“La canciller viaja mañana”, confirmaron fuentes del gobierno. La misión argentina coincidirá con la visita del secretario de Estado, Antony Blinken, a Brasil y Argentina, dos países que según la Casa Blanca son dos de sus socios “más importantes” en América Latina. Blinken llegará el miércoles a Brasil para reunirse con Lula y el jueves viajará a Buenos Aires para verse con Javier Milei.
Este miércoles y jueves serán las primeras sesiones grandes del foro que reúnen a los ministros de Relaciones Exteriores del grupo de los 20 en Río de Janeiro, dirigida por el canciller de Brasil, Mauro Vieira, y habrá un encuentro virtual de los ministros de Finanzas y banqueros centrales, previo al encuentro presencial que mantendrán entre el miércoles y jueves de la semana próxima en Sao Paulo.
Las reuniones del canal financiero serán coordinadas por el ministro de Hacienda del país vecino, Fernando Haddad. La agenda también incluye una cumbre el martes de los ministros de Finanzas y banqueros centrales de los BRICS (Basil, Rusia, India, China y Sudáfrica), del que Milei se retiró después de que el gobierno de Alberto Fernández anunciara la integración de la Argentina.
Brasil preside este año el foro con una agenda centrada en la lucha contra el hambre, el desarrollo sostenible y la gobernanza global. Lula propone “modernizar” y “democratizar” la ONU, la Organización Mundial del Comercio (OMC) y las instituciones de Bretton Woods (FMI y el Banco Mundial), mientras Milei promueve un alineamiento con EE.UU y el FMI, en detrimento del Mercosur.
Mondino ya fue recibida por Vieira en Brasilia y ahora viajará con Federico Pinedo. El canciller del país vecino confirmó que el gobierno argentino pidió una reunión bilateral al margen de la reunión de cancilleres del G20. “Hay una larga lista de pedidos de reuniones bilaterales y, desgraciadamente, no habrá tiempo para todos. Reino Unido, Argentina, Francia y Noruega lo solicitaron”, dijo a Oglobo.
Las tensiones escalaron durante la campaña, cuando Milei acusó a Lula de “comunista envenenado”, en medio del apoyo del mandatario de Brasil al candidato opositor Sergio Massa. El acuerdo Mercosur-Unión Europea es otro punto en discusión. Milei recibió este lunes al canciller de Francia, Stéphane Séjourné, quien viajó al país y visitará Brasil para explicar su negativa al acuerdo comercial.
Argentina, el tercer socio comercial de Brasil después de China y Estados Unidos, arrancó el año con un ligero saldo comercial favorable en la balanza con Brasil de US$ 29 millones, la segunda cifra mensual positiva desde diciembre de 2022, cuando en igual mes del año pasado había exhibido un déficit bilateral de US$ 207 millones, según Abeceb.
El flujo comercial en el primer mes del año totalizó USD 1.564 millones, registrando una caída del 15,6% anual, comparado con los US$ 1.856 millones en enero de 2023 y mayor a la verificada en diciembre de 2023. La caída del flujo comercial obedeció principalmente a la fuerte caída de las importaciones (25,4%) ya que las exportaciones anotaron una moderada caída (3,2%).
En Brasil, hay inversiones en suspenso de empresas con negocios en Argentina. Mientras el Banco Central del país vecino estima un crecimiento del 2% en 2024, Argentina cerraría el año con una caída del PBI superior al 3% por el plan de shock puesto en marcha en diciembre. Así, la expectativa es que el superavit comercial con Brasil se reduzca hasta volver al déficit en la segunda mitad.
Clarín
