AF vuelve de México y se verá con los gobernadores del Norte, que ahora buscan bajar las primarias para alejar las urnas del escándalo. ¿Qué dirá la oposición?
El escándalo por la inoculación irregular de vacunas, que arrasó con toda la agenda oficial, congeló aún más la discusión por la postergación de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), que los gobernadores del Norte volverán a plantearle en Corrientes este jueves al presidente Alberto Fernández, que llegará directo desde México con la crisis a cuestas.
Desde que, a fines del año pasado, alzaron la voz por primera vez en público para pedir por la suspensión de las elecciones previstas para agosto, los mandatarios provinciales se encontraron con el mismo escenario: la indefinición de la Casa Rosada. Sin posición tomada, el Presidente los mandó a buscar consensos por su cuenta en el Congreso y advirtió sobre la necesidad de que una suspensión contara con el claro aval de Juntos por el Cambio.
Con bajísimo perfil, las negociaciones se empezaron a mover en la Cámara de Diputados, pero con un giro. Lanzado el globo de ensayo sobre un supuesto impulso del oficialismo para implementar una suerte de ley de lemas, las conversaciones ya no apuntaron a buscar consensos para suspender las primarias sino solo para postergar las PASO, previstas para agosto, a septiembre, y las generales, programadas para octubre, a noviembre. En paralelo, a principios de febrero, el Ministerio del Interior publicó el pliego de condiciones para licitar el recuento provisional de votos, tanto de las PASO como de las generales.
Pero el sacudón del vacunatorio VIP complicó aún más la situación. “¿Y ahora la oposición va a querer postergar las elecciones?”, se preguntaba este miércoles un portavoz oficial, en referencia a si Juntos por el Cambio analizaría ahora que tal vez le conviene que los comicios se realicen lo antes posible y agarren al Gobierno todavía golpeado por el escándalo, sin tiempo de levantar la guardia para mostrar el avance de la campaña de la vacunación o una recuperación económica.
“Teníamos dos elementos clave para llegar bien a las elecciones, la campaña de vacunación y la recuperación económica. Ahora, uno está manchado, hay que recuperarlo”, explican en una oficina de la Casa Rosada. Las velas están prendidas para que se cumplan las predicciones económicas que trazó Martín Guzmán, mientras desde Rusia, la asesora presidencial Cecilia Nicolini manda novedades sobre las 30 millones de Sputnik V que el Instituto Gamaleya se comprometió a proveerle a la Argentina. Hasta ahora solo llegaron 1,2 millones de dosis. Nicolini traerá el cronograma certero de entrega de todo lo que falta. Se la aguarda con ansias.
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Este jueves, los gobernadores del Norte volverán a poner el tema sobre la mesa cuando reciban al Presidente en Yapeyú. En principio, el Presidente tiene previsto viajar directamente desde México hacia Posadas, Misiones, para trasladarse desde allí a Yapeyú con parte de la comitiva que lo acompañó en la visita al país que gobierna Andrés Manuel López Obrador.
En Yapeyú, Fernández participará primero del acto por el 243° aniversario del natalicio del General San Martín, junto al gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, y los mandatarios Jorge Capitanich (Chaco), Gildo Insfrán (Formosa), Juan Manzur (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca), Gerardo Morales (Jujuy), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Gustavo Sáenz (Salta). Desde Buenos Aires viajará el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro. Después, comenzará la reunión de gobernadores en las que se abordarán “temas fundamentales para disminuir las asimetrías con el centro del país”, según se informó.
El Gobierno sabe que, como en Chilecito hace un mes, los gobernadores volverán a insistir en la necesidad de suspender o postergar las PASO, inquietud que comparten con los intendentes del conurbano bonaerense, que este miércoles estuvieron en la Casa Rosada con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. “Vamos a tener una segunda ola, vamos a estar en pleno operativo de vacunación ¿y vamos a decirle a la gente que tiene que ir a votar?”, se preguntaba un jefe comunal al salir de Balcarce 50.
Con todo, la postergación tampoco termina de convencer al círculo íntimo del Presidente. “¿Qué sentido tiene meternos en una discusión monumental en el Congreso para patear las elecciones un mes? Nos vamos a exponer a que nos acusen de querer hacer trampa, de cualquier cosa. No tiene sentido”, le dijo a Letra P un ministro de diálogo permanente con Fernández.
En la interna de la coalición se sabe, además, que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner no está de acuerdo con dar la discusión. “Cuando cambiamos la fecha de las elecciones nos fue mal”, recuerda en la intimidad, en alusión a 2009. A eso hay que sumarle el impacto, todavía desconocido, que podría tener el escándalo de las Sputnik VIP.
Letra P
