Quién mandó a sacar los pasacalles de la hermana del presidente Milei. Las opciones de LLA en la estratégica elección bonaerense del 2025.
“Luego de un gran enojo”, según tuiteó el portavoz presidencial Manuel Adorni, Karina Milei ordenó retirar los pasacalles con su nombre que se habían desplegado cerca del Luna Park, horas antes del show literario-musical de su hermano. Un rato antes del posteo en X, frente al despliegue de cartelería con menciones a “El Jefe”, desde Casa Rosada se descartó todo protagonismo de la hermanísima en la presentación del presidente. “El evento de hoy es sobre Javier Milei y la presentación de su libro, nada más. Fin”, trató de cerrar el capítulo Adorni con una intensidad curiosa para un tema menor.
¿Por qué, con gran enojo, Karina hizo bajar los carteles que colocaron sus leales? Hubo dos referentes visibles que firmaron al pie de los pasacalles: Angélica “Kelly” Correa, armadora de La Libertad Avanza (LLA) en CABA, y Ceferino Malnero. Los dos aparecen vinculados a Juan Pablo Scalese, soldado de Karina y jefe de LLA porteña, con terminales en Martin Menem, el brazo político de la hermanísima en las provincias. Se especuló, además, que los carteles los retiró personal del Gobierno de la Ciudad pero no fue así: los organizadores se encargaron de sacarlos.
No es la primera vez que los dirigentes se sobregiran y hacen una de más, pero el “enojo” de Karina y la orden de bajar los carteles generaron sorpresa entre los libertarios. Temprano, una fuente de ese entorno consultada por Cenital confirmó que en el acto del Luna Park la centralidad absoluta sería de Milei. “Karina, cero”, se dijo. Al rato, llegó la indicación de bajar los pasacalles que tenían el nombre de Karina, referencias a “El Jefe”, pero ninguna mención al presidente.
En la previa del acto, un dirigente libertario sugirió que el planteo de descolgar los pasacalles lo propuso Adorni y que Karina entendió la sugerencia del portavoz. En una sobre lectura de esa interpretación, se especuló que el vocero no haría un planteo de ese tipo de manera autónoma, sin el OK o la indicación del mandatario. Especulaciones, nomás, en la antesala del show literario-musical del presidente.
Simple: en el ecosistema Milei, a pesar del mega poder que exhibe la hermanísima, son muchos los dirigentes y sectores que la desafían y la cuestionan. No solo los javieristas históricos, que fueron relegados del círculo del poder presidencial, sino también los referentes en las provincias que ven que Karina bendice a otras figuras y trata de desplazarlos. En esa tarea, la secretaria General de la Presidencia se mueve en tándem con Martín y “Lule” Menem. Al último lo nombró en Casa Rosada y puso a cargo del armado a partir de designar a los responsables locales de PAMI y Anses.
“The Boss”
La decisión de bajar los pasacalles, puestos por dirigentes que reportan de manera directa a Karina, terminó siendo más curiosa que los propios carteles. Ya hubo varios episodios en los que la hermana del presidente protagonizó actos y shows. Hace doce días estuvo en Rosario con la diputada nacional Romina Diez, una influencer financiera, economista libertaria, que se convirtió en la karinista santafesina. Para entender el purismo que pretende la hermana: otros actores de LLA, que son diputados, no fueron a la presentación en Rosario.
Primero fue Córdoba, y luego vinieron Salta, CABA y Santa Fe, destinos en los que Karina, en general escoltada por los Menem, se enfocó en el armado de LLA de cara a las elecciones del 2025. Fueron sus primeras apariciones territoriales cruzadas por la presunción de que, además de armadora del partido emblema de su hermano, Karina empieza a jugar para tener su propio protagonismo electoral.
La versión clásica es que sería candidata el año próximo en la provincia de Buenos Aires. La secretaria general vive en Vicente López, donde construyó una relación fluida con el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri. En el entorno del presidente dicen que hablar del 2025 es prematuro y en LLA dan por hecho que no está en los planes de Karina ser candidata. Aplica, en la especulación, una lógica convencional: la suerte de Milei en la elección del 2025 se juega en el AMBA, tanto en CABA como en la provincia de Buenos Aires.
Se trata no solo de los territorios en los que peor le fue a Milei en 2023, sino donde aún hoy registra los niveles más bajos de adhesión. Un informe de Opina Argentina, de Facundo Nejamkis, de marzo pasado, mostró que el AMBA es el sector donde la opinión pública reclama más dureza contra Milei. En el área metropolitana, el 46% dice que debería negociar, cuando esos números llegan al 60% en Cuyo y NOA, al 59% en el NEA y al 55% en el centro del país. Es decir: el AMBA es, de todas las regiones, la más hostil para el mandatario.
Otro dato es que, en el 2023, LLA perdió tres veces en la provincia de Buenos Aires: en las PASO, la general y el ballotage. El razonamiento clásico que plantean en LLA es que la mejor forma de competir es apostar al apellido Milei, en cuyo caso lo indicado sería que juegue Karina. Se afirma que Javier no está de acuerdo y que ella no está interesada.
Es más: el “indulto” del presidente a José Luis Espert y su entronización como presidente de la Comisión de Presupuesto, sumado al protagonismo que le da en sus presentaciones parecen formar parte de una campaña anticipada de Espert como candidato libertario para el año próximo. El diputado hace su parte: es el dirigente de LLA más activo en criticar a Axel Kicillof.
Karina es, sin embargo, una figura resistida: sin voz pública y con un rol de monje negro, no consigue la empatía –al menos en un sector de la sociedad- que logra su hermano presidente. Según un estudio reservado de Analogías de marzo pasado, el nivel de conocimiento de la secretaria general era del 66% y 1 de cada 4 consultados aseguró tener “muy mala” imagen de ella. El porcentaje rozaba el 40% cuando la pregunta era entre personas con educación universitaria completa. Esta semana, Karina ingresó al mundo X –ex Twitter– un territorio donde el libertarismo se mueve con comodidad.
Milei aplica, casi como regla, el anti manual de la política. Según esa lógica, a diferencia de los que sugieren que debería poner su apellido en la elección del 2025, el presidente buscará otro formato para evitar la tentación, muy habitual, del nepotismo electoral. “Karina no puede ser candidata, porque no puede hablar en un acto, ni en un reportaje ni mucho menos en un debate”, afirma una fuente libertaria para rechazar, desde el pragmatismo, cualquier posibilidad de que la hermana sea la principal figura electoral de LLA en la provincia el año próximo.
Cenital