La Asociación Gremial de Docentes (AGD) del Ciclo Básico Común de la UBA denunció que varios profesores de esa casa de estudios recibieron en los últimos días “llamadas intimidantes y amenazantes” por su adhesión a las protestas contra el recorte del presupuesto en las universidades.
A través de un comunicado que exige “Basta de amenazas a docentes”, el gremio advirtió que ese tipo de amenazas están “buscando generar terror para bloquear la movilización y la lucha” de los docentes y estudiantes universitarios contra el ajuste impuesto por el gobierno de Javier Milei.
Uno de esos casos es el de una docente de la sede del CBC Estación Buenos Aires que recibió este miércoles en su teléfono particular una tanda de mensajes desde un número desconocido: “Haga su trabajo en vez de adoctrinar, zurda”, dijo el primero de ellos.
No fue el único, hubo una seguidilla: “Milei 2031 zurda hija de puta”, “Van a llorar mucho los zurdos como vos, se vienen décadas de prosperidad libertaria”, y algunos más en el mismo tono y sentido.
“Primero me agregaron a un grupo que se llamaba ‘Para hacer amigos y enemigos’, y eso me encendió las alertas; salí y lo bloqueé. Luego, desde distintos números llegaron mensajes, fotos de Milei y hoy el whatsapp de mi teléfono se desorganizó y dejó de funcionar”, contó a Página/12 la docente que prefirió reservar su identidad “por temor a que esto escale”.
Pero el suyo no fue único el caso. Varios profesores y profesoras hicieron circular en un grupo de whatsapp mensajes y flyers que recibieron en los últimos días. Uno de ellos instaba a la delación por parte de estudiantes, tenía el dibujo de un león y decía: “Si tenés un docente que adoctrina, pasanos el número y el nombre que nosotros te ayudamos”.
Ella da clases en la UBA desde hace más de 20 años y asegura que nunca vivió algo así. Reconoce haber dado su número de teléfono a sus estudiantes pero nunca pensó que fuera utilizado para amedrentarla.
En las clases “no doy mi posición partidaria pero sí mi defensa a la universidad pública y al Estado”, indicó y sospecha que tal vez eso fue lo que llevó a que la “marcaran”, supone.
Participó de clases públicas, manifestaciones y distintas actividades promovidas por los estudiantes y el gremio. Inclusive algunas de las que se realizaron en la sede de Estación Buenos Aires.
El gremio alertó que esa amenazas se dieron en un contexto en el que desde el Gobierno se alienta la persecución contra los trabajadores universitarios. Para el caso, citó como ejemplo la declaración del subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, quien días atrás dijo haber abierto un mail de denuncias de supuestos “adoctrinamientos” o “imposición de una línea de pensamientos” en clase en el que “se procesaron 600 denuncias, de las cuales son fuertes el 15 por ciento”.
Por estos motivos, la AGD-CBC responsabilizó “al gobierno nacional de estas acciones persecutorias y de cualquier consecuencia que se desprenda” de ellas, y dejó claro que “la mayoría docente y estudiantil está convencida y con fuerza para seguir esta lucha” en defensa de la universidad pública.
Página/12