Tras la revelación de El Destape sobre el uso irregular de los fondos públicos para beneficiar al testigo clave en la causa contra Amado Boudou, la página del hotel mendocino apareció “fuera de servicio”.
La Masia, el hotel boutique financiado por el gobierno de Mauricio Macri para beneficiar al arrepentido Alejandro Vandenbroele se quedó sorpresivamente sin página web. Luego de que El Destape revelara en exclusiva que Cambiemos le había otorgado sumas millonarias a Vandenbroele a través del programa de protección de testigos, el sitio www.lamasiamendoza.com.ar apareció “fuera de servicio” por supuestas tareas de “mantenimiento”.
“Ubicada en una exclusiva zona de Chacras de Coria y rodeada de viñedos y bodegas, La Masía Hotel Boutique ofrece lugares únicos, especialmente diseñados para que sus huéspedes vivan una experiencia diferente”, describía en su página el “emprendimiento” de Vandenbroele. “La Masía es una casona de campo con estilo romántico, con una decoración que fusiona el arte con el vino. Cuenta con seis habitaciones equipadas con aire acondicionado, calefacción y TV con cable. Tanto las habitaciones como el comedor y el living dan a un jardín de 3000 mts el cual cuenta con una piscina de 14 mts y un jacuzzi”, continuaba detallando el portal del alojamiento.
Pero esa información, sumada a las fotos del lugar y otros datos, ya no está más disponible para el público: “El sistema está momentáneamente fuera de servicio por mantenimiento. Estaremos de vuelta a la brevedad. Agradecemos su paciencia y comprensión”, alerta ahora la pagina.
El caso
Según el legajo secreto al que tuvo acceso El Destape, el ministerio de Justicia y Derechos Humanos que conducía Germán Garavano le había otorgado a Vandenbroele unos 2 millones de pesos a través del programa de Protección de Testigos, que en la práctica fue utilizado para presionar, direccionar y premiar a arrepentidos que cumplieran su tarea: apuntar a ex funcionarios K. En este caso, el apuntado fue ex vicepresidente Amado Boudou, quien resultó condenado a cinco años de prisión, en gran medida gracias a la declaración de Vandenbroele.
La entrega de ese dinero para este testigo clave se hizo a través del director del programa Francisco Lagos y de Carlos Linsalata, un policía porteño que migró al ministerio de Justicia para encargarse del seguimiento de los arrepentidos que le interesaban a Macri y su séquito de operadores judiciales. En una de las notas enviadas por Linsalata a sus superiores, el 24 de agosto de 2018, les pide $1.500.000 para un proyecto laboral para Vandenbroele. Da en esa nota una información clave: “Cabe destacar que el día 07 de Agosto pasado fueron condenados a prisión con cumplimiento efectivo por más de 5 años el ex Vicepresidente de la República Argentina el Sr. Amado Boudou”. Parece que era hora del pago por objetivo cumplido.
Ahora que se reveló el escándalo, casualmente la página ya no está disponible.
(de El Destape)