Subió un punto porcentual, que representa 250.000 desocupados más que un año atrás. Es el mayor nivel de desempleo de la gestión Macri.
La desocupación subió del 9,6 al 10,6% según los datos del INDEC del segundo trimestre de este año en relación a igual período de 2018. Proyectando esa tasa al total de la población urbana, hay 2.050.000 desocupados urbanos, 250.000 más que un año atrás. Si se incluye la población rural, el desempleo golpea a más de 2,5 millones de personas.
También aumentó la subocupación: pasó del 11,2 al 13,1%. Son 2.530.000 personas que trabajan pocas horas aunque dispuestas a trabajar más. Y representan 420.000 más que un año atrás.
De estos números se desprende que casi 4.600.000 personas tienen problemas de empleo porque no encuentran trabajo o realizan trabajos de pocas horas, en especial en la informalidad o en “changas”. Son 670.000 más en tan solo un año.
El 10,6% de desempleo es el mayor nivel de desempleo de la gestión de Mauricio Macri. En el segundo trimestre de 2016 fue del 9,3%, un año después bajó al 8,7, volvió a subir al 9,6% en el segundo trimestre de 2018, para crecer al 10,6% en el mismo período de este año. En el primer trimestre de este año fue del 10,1%.
Ese crecimiento del desempleo -en un contexto de recesión- se debe a que más gente salió a buscar trabajo para compensar la caída del ingreso de las familias, alcanzando la tasa de actividad el récord del 47,7% de la población urbana frente al 46,4% de un año atrás.
El nivel de empleo también aumentó pero menos que la tasa de actividad ( del 41,9 al 42,6%) y en empleos precarios o de changas. Eso explica el aumento del desempleo y el mayor aumento de la tasa de subocupación. Así en un contexto de menor actividad y caída de los ingresos, se amplió el trabajo precario, de pocas horas o “changas” en detrimento incluso de ocupaciones a tiempo completo.
(de Clarín)