“LACRAS, MERCENARIOS”: LA BRONCA DE SERGIO MALDONADO CONTRA LA OPERETA DE MAJUL Y ANDAHAZI

0
1117

El hermano de Santiago respondió a quienes en La Cornisa (LN+) usaron su caso para un juego politiquero contra el kirchnerismo, que denuncia interesadamente a Rodríguez Larreta por el caso de Ramona.

En la noche del domingo por el canal LN+, durante la emisión del programa “La Cornisa”, los periodistas Luis Majul y María Julia Oliván le hicieron la segunda al novelista Federico Andahazi mientras conversaban con el exministro de Salud Rodolfo Rubinstein sobre la expansión del Covid-19 en los barrios populares y villas de la Ciudad de Buenos Aires.

Durante casi dos minutos, Majul, Andahazi y Oliván se dedicaron a construir una despreciable amalgama de definiciones, conceptos y prejuicios.

Majul – ¿Por qué insistís vos con que le quieren poner etiqueta porteña al virus, Federico? ¿En qué te basás?

Andahazi – Está muy claro. De alguna forma Máximo Kirchner…

Majul – ¿Vos volvés a decir que la persona que murió en la Villa 31, Ramona… cómo se llama?

Andahazi (leyendo) – Sí, se llama Ramona Medina

Majul – Ramona Medina… ¿Por qué decís que la quieren convertir en un Maldonado? ¿No es demasiado eso?

Andahazi – Por que ya lo están haciendo, Luis.

Majul – ¿Dónde lo están haciendo?

Andahazi – En las redes sociales…

Oliván – En las redes sociales, sí. Acaban de decir “están matando a los nuestros”

Andahazi – “Están matando a los nuestros”, exactamente…

Majul – Perdón, pero “están matando a los nuestros” es como que, no, es medio perverso eso… Es como si fueras con un revólver que tiene un balín de Covid-19. No puede ser eso. ¿Quién lo dice? No puede ser. No lo dice ningún dirigente importante, ¿o sí?

Andahazi – Bueno, se empieza por las redes sociales. Vos sabés cómo se construye. Vos sabés cómo se empezó a construir el caso Maldonado. Se empezó a construir desde abajo, hasta que salieron a hablar los dirigentes pasó mucho tiempo. Pero se está construyendo en ese sentido, Luis.

Majul – Pero si Horacio Rodríguez Larreta se saca fotos y está con el Presidente.

Andahazi – Bueno, yo quiero pensar que es lo suficientemente inteligente para darse cuenta de que lo están cercando. Por una parte lo palmean y por otra le da rebencazos. Claramente lo quieren cercar, lo quieren restar poder y, sobre todo, proyección política.

Oliván – Estaba pensando exactamente dónde lo había leído. “Urgente, nos mataron a Ramona”. La gente de Garganta Profunda

Andahazi – De Garganta Poderosa

Oliván – Poderosaaaa, ay, qué estoy diciendo… Menos mal que no está 678 (risas)…

La reacción de Sergio Maldonado no se hizo esperar. El hermano de Santiago, quien desde hace 33 meses encabeza una lucha por verdad y justicia para el joven desaparecido y muerto en el marco de una represión de Gendarmería al mando de Patricia Bullrich en Chubut el agosto de 2017, se desahogó por Twitter.

Ya este lunes Maldonado explicaría mejor su bronca. En diálogo con Alejandro Bercovich, Noel Barral Grigera y Alejandro Wall en Radio con Vos, Sergio dijo que está realmente “podrido” de escuchar sistemáticamente mentiras sobre el caso de su hermano. “El ‘Andanazi’ este se la pasa diciendo estupideces, siempre desde el odio. Pero nunca agarraron el expediente para saber lo que dice la causa de Santiago”, dijo enojado.

Y agregó que “en vez de hacerse cargo de la muerte de Ramona, del asesinato por desidia, dejadez y abandono, poniendo el foco y ver por qué pasó lo que pasó, prefieren hablar de otro tema. Eso es lo que hacen siempre los periodistas que no leen”.

Entre los ejemplos que mencionó Sergio para ejemplificar al periodismo indeseable, mencionó a Pablo Duggan, quien hoy es periodista estrella del canal C5N y de Radio Diez. “Ahora dice que le molesta cómo los periodistas ‘no hacen periodismo’, pero él es alguien que dijo un montón de cosas (mentirosas sobre el caso de Santiago, NdR) y ahora se convirtió en el Che Guevara del periodismo”.

La reacción de Sergio Maldonado es no solamente lógica sino más que comprensible. La Izquierda Diario viene acompañando su lucha (sin descanso junto a su familia y la abogada Verónica Heredia) y difundiendo las alternativas de la causa penal en la que el Poder Judicial se sigue negando a llegar a la verdad y la justicia.

Pero en este caso vale decir que la campaña contra la familia de Santiago, además de sus componentes clasistas y criminalizadores de las luchas populares, tiene el mediocre objetivo político de cuidar celosamente las espaldas de Juntos por el Cambio, especialmente sobre su referente del momento, Rodríguez Larreta.

Lo curioso es que, aunque quieran, a las huestes kirchneristas les puede resultar muy costoso atacar a Larreta sin correr el riesgo de “tirarse un tiro en el pie”. Porque la muerte de Ramona fue por Covid-19 en un contexto socioambiental donde todo estaba dado para ella, su familia y sus vecines se contagiaran. Y Ramona venía denunciando desde La Poderosa la falta sistemática de agua en al Barrio 31 de Retiro.

Larreta y sus secuaces son definitivamente responsables políticos del destino de Ramona, del referente del comedor “Estrella de Belén” Víctor Giracoy y de mucha gente más de ese barrio porteño. Pero dejar a más de 40.000 personas que viven hacinadas y bajo la línea de la pobreza sin agua es responsabilidad compartida entre la gestión porteña de Juntos por el Cambio y la nacional del Frente de Todos.

De hecho el agua potable en la Ciudad de Buenos Aires es distribuida por la empresa AYSA (Agua y Saneamientos Argentinos) cuya titular (puesta a dedo por Alberto Fernández) es Malena Galmarini de Massa y quien en este tema prefirió hacerse la distraída y mirar para otro lado en silencio.

La conducta de Galmarini de Massa fue repudiada incluso por referentes del cristinismo como Hebe de Bonafini, aunque los medios oficialistas no le dieron mucha “cabida” a esas voces disonantes internas de la coalición de Gobierno. Son esos mismos medios que no están informando seriamente sobre cómo se vive la cuarentena obligatoria en las cientos de villas y asentamientos del conurbano bonaerense, gobernado por Axel Kicillof.

Aunque hay rasgos y determinantes que diferencian en algunas cuestiones a las villas porteñas de las bonaerenses, es obvio que meter la lupa en el conurbano profundo podría abrir una caja de Pandora más que inconveniente para quienes desde la Casa Rosada, desde La Plata y varias intendencias peronistas procuran despegarse del desastre al que se llegó en los barrios porteños gobernados por el macrismo.

Mientras esas espurias rencillas políticas del régimen se desarrollan, hoy la lucha por justicia para Ramona, para quienes murieron en la 31 por el Covid-19, o por hambre o por otras enfermedades se da en paralelo a la lucha para que no haya más personas contagiadas en esos barrios vulnerables.

Y, por supuesto, esa lucha en muchos aspectos es la misma que la lucha por verdad y justicia para Santiago Maldonado. Un crimen de Estado que lleva ya 33 meses de impunidad absoluta, gobierne quien gobierne.

La Izquierda Diario


DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí