El colectivo travesti trans convoca a la primera marcha plurinacional por una ley de reparación histórica.
A 11 años del reconocimiento a la identidad de género en Argentina, la ley que trajo la democracia para trans y travestis, el colectivo hoy reclama una reparación por lo que vivieron. «Es un reconocimiento por todo el daño que nos causaron», dicen las activistas. Este 24 de mayo realizarán la Primera Marcha Plurinacional por una «Ley de Reparación Histórica Ya».
«Es un reconocimiento por todo el daño que nos causaron: la persecución, las violaciones, las torturas, las caídas presas, el homicidio de tantas compañeras y amigas. Por una persecución institucional tanto del Estado como de la sociedad toda, y hasta de la propia familia. Nos negaron la existencia, nos mataron y nos prohibieron por el solo hecho de existir«, dijo a Presentes Patricia Rivas, sobreviviente trans de 56 años, activista de Travestis-Tras Las Históricas Argentina.
Se trata de una normativa que permita la entrega de una pensión mensual y reparatoria a las trans y travestis mayores de 40 años que hayan sido víctimas de violencia institucional en base a su identidad de género.
ley de reparación histórica.
A 11 años del reconocimiento a la identidad de género en Argentina, la ley que trajo la democracia para trans y travestis, el colectivo hoy reclama una reparación por lo que vivieron. «Es un reconocimiento por todo el daño que nos causaron», dicen las activistas. Este 24 de mayo realizarán la Primera Marcha Plurinacional por una «Ley de Reparación Histórica Ya».
«Es un reconocimiento por todo el daño que nos causaron: la persecución, las violaciones, las torturas, las caídas presas, el homicidio de tantas compañeras y amigas. Por una persecución institucional tanto del Estado como de la sociedad toda, y hasta de la propia familia. Nos negaron la existencia, nos mataron y nos prohibieron por el solo hecho de existir«, dijo a Presentes Patricia Rivas, sobreviviente trans de 56 años, activista de Travestis-Tras Las Históricas Argentina.
Se trata de una normativa que permita la entrega de una pensión mensual y reparatoria a las trans y travestis mayores de 40 años que hayan sido víctimas de violencia institucional en base a su identidad de género.
Una democracia real
El colectivo advierte que esta violencia tuvo lugar no solo durante la última dictadura militar. La democracia para ellas no llegó en 1983, con el fin del Terrorismo de Estado. Los edictos policiales que las criminalizaban sólo por ser travestis o trans -que fueron derogados recién en 1998 en la Ciudad de Buenos Aires y una década después en la provincia de Buenos Aires-, les valió detenciones, encarcelamientos y las violencias desatadas por el personal policial en esos establecimientos y en la calle.
«Pedimos una reparación histórica porque sabemos que es el Estado quien perpetuó el terrorismo de Estado hacia los cuerpos travestis y trans no solo en dictadura sino también en gran parte de la democracia. Podemos decir que casi dos décadas después empezamos a adquirir algunos derechos. Pero con los delitos contravencionales hasta casi el 2000 multaban y encarcelaban a las personas travestis y trans. El Estado fue el que criminalizó nuestras identidades y generó un terrorismo sobre nuestros proyectos de vida e identidades. Por eso, el Estado debe responder», dijo a Presentes Alejandra Silvestre, docente y militante de Mujeres Trans Argentina (MTA).
Además de la derogación de los edictos policiales, la normativa argentina en materia de derechos humanos que comenzó a instalarse a partir del 2010 contribuyó a mejorar la situación del colectivo travesti trans.
«Nosotras no tenemos 40 años de democracia, tenemos 12, desde que se aprobó la Ley de Identidad de Género», lanzó la sobreviviente trans Marcela Viegas Pedro en su declaración en el juicio por delitos perpetrados en las brigadas del sur del Conurbano de la provincia de Buenos Aires, conocida como causa Brigadas, ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 1 de La Plata. Cuando era muy joven estuvo detenida en el Pozo de Banfield, uno de los 230 centros clandestinos que funcionaron en la provincia de Buenos Aires bajo el Terrorismo de Estado.
Hacia más derechos
Para la militante travesti presidenta de La Rosa Naranja, Marcela Tobaldi, actualmente en la Argentina existe un «piso de derechos«. Ésto, afirma, fue otorgado por «el matrimonio igualitario, la ley nacional de identidad de género, la ley de cupo que prevé este 1% dentro de los empleos públicos y también privados». En este marco, aún falta «sentar este piso de derecho de reconocer y reparar, que es un reconocimiento a nuestras vidas, a nuestras luchas y a nuestros recorridos».
Actualmente hay tres proyectos de ley presentados en la Cámara de Diputados de la Nación que buscan la reparación histórica. Uno fue presentado por la diputada Mónica Macha, otro por Mara Brawer y uno por Gabriela Estevez, todas del Frente de Todos. «Están trabajando en asesores de la Comisión de Mujeres para hacer un proyecto de síntesis y poder dictaminar», dijo a Presentes Brawer, y aclaró que «la idea es sacarlo este año».
Además, en la provincia de Buenos Aires, por iniciativa del Ministerio de Mujeres, Políticas de Géneros y Diversidad Sexual, el gobernador Axel Kicillof envió en octubre del año pasado un proyecto de ley a la legislatura que busca reconocer y reparar al colectivo. «Está muy avanzado el proyecto de ley», dijo Tobaldi a Presentes sobre la iniciativa que considera «superadora» frente a las demás.
Este proyecto prevé un monto de las pensiones más alto que los anteriores ya que equivale a «tres sueldos básicos de la Categoría Ingresantes del Agrupamiento Administrativo – Clase 4».
Santa Fe, la pionera
Por otra parte, la provincia de Santa Fe en 2018 fue pionera en interpretar sus leyes locales vinculadas a lesa humanidad en favor del colectivo travesti trans.
En este sentido, el Director de la Caja de Pensiones Sociales de la provincia extendió a este colectivo la aplicación de la Ley Provincial N° 13.298 de 2012 de Pensión para presos y presas políticos, gremiales o estudiantiles (1976-1983). Además, en abril del año pasado se presentó un proyecto de ley de reparación.
Los proyectos en general apuntan a las travestis y trans mayores de 40 años porque el promedio de vida de este colectivo ronda los 35 y 40 años. «Estamos hablando de una población que la mayoría no llega a los 40 años. Todas aquellas que han pasado los 40 años, que son las que vivieron el terrorismo, son sobrevivientes», dijo Silvestre a esta agencia.
Reivindicar derechos
Esta reparación «implica borrar las heridas y todas las persecuciones policiales que tuvimos que comernos nada más que por ser de una identidad distinta», reconoció Marcela Saibek, de 57 años y militante de Travestis-Tras Las Históricas Argentina. «Nos vulneraron en todo sentido, física y moralmente, nuestros derechos. Nos arrebataron los derechos. No existíamos como ciudadanas. Por eso, esta reparación implica reivindicar nuestros derechos y no que no nos falten más el respeto», concluyó.
La marcha se realizará a las 15 de forma federal el 24 de mayo. En la Ciudad de Buenos Aires partirá desde Plaza de Mayo hasta el Congreso de la Nación.
Para llevarla adelante las distintas organizaciones que convocan están recaudando fondos para recibir a compañeras, garantizar sonido y técnica (para un festival luego de la marcha), agua y víveres. Para participar de esta recaudación se puede enviar dinero al alias HISTORICASARGENTINAS.
Presentes